Alimentos que dan energía y mejoran el estado de ánimo
Podemos mejorar nuestro
estado de ánimo y niveles de energía tomando ciertos alimentos y es que nuestra
alimentación puede aumentar la energía proporcionando suficientes calorías,
incluyendo estimulantes como la cafeína y llevando al metabolismo a quemar el
combustible con mayor eficacia. Para el estado de ánimo, los mejores alimentos
son los que estabilizan el nivel de azúcar en la sangre y activan la liberación
de sustancias químicas como la serotonina en el cerebro que nos hacen sentirnos
bien. Esta es una pequeña guía sobre los mejores alimentos para dar a nuestro
sistema un empujón y hacernos sentir más felices y más fuertes.
Hidratos
de carbono buenos: son la fuente de combustible preferida de
nuestro cuerpo y elevan los niveles de serotonina. Evitar los alimentos dulces
que provocan picos y bajones de azúcar en sangre, causando fatiga y mal humor.
En su lugar, tomar granos enteros, como el pan de trigo entero, el arroz
integral y los cereales. El cuerpo absorbe los granos enteros más lentamente,
manteniéndose estables los niveles de energía y de azúcar en sangre (aprender
cuáles son los hidratos buenos e hidratos malos).
Frutos
secos como los anacardos, almendras, avellanas y las nueces de Brasil:
estos frutos secos no sólo son ricos en proteínas, sino que también contienen
magnesio, un mineral que desempeña un papel vital en la conversión del azúcar
en energía. Las investigaciones sugieren que una deficiencia de magnesio puede
agotar la energía. Las nueces de Brasil aportan selenio y ayudan a reforzar el
estado de ánimo de forma natural. Los estudios han indicado la existencia de
una relación entre unos niveles bajos de selenio y un pobre estados de ánimo.
También se encuentra el silencio (pero en cantidades más bajas) en carnes,
mariscos, habichuelas y granos enteros.
Carnes
magras: la carne de cerdo magra, la carne de ternera magra, el
pollo sin piel y el pavo son fuentes saludables de proteínas, incluido el
aminoácido tirosina. La tirosina incrementa los niveles de dopamina y noradrenalina,
unas sustancias químicas del cerebro que nos pueden ayudar a sentirnos más
alerta y concentrados. Las carnes también contienen vitamina B12, que puede
combatir el insomnio y la depresión.
Salmón: el
pescado graso como el salmón, es rico en ácidos grasos omega-3 ácidos grasos
que, según diversos estudios, podrían protegernos de la depresión. Los ácidos
grasos omega-3 ofrecen una amplia gama de beneficios, entre los que se incluyen
la salud coronaria. Además del pescado, las fuentes de omega-3 incluyen los
frutos secos y los vegetales de hoja verde y oscura.
Verduras
de hoja verde: otro nutriente que puede reducir el riesgo
de depresión es el folato, que se encuentra en las verduras de hoja verde,
incluyendo las espinacas. También está presente en el brécol, las coles de
Bruselas, los frutos secos y los cítricos.
Fibra: la
fibra es un estabilizante de energía. Ralentiza la digestión, proporcionando un
suministro más constante de energía durante todo el día. Aumentar el consumo de
fibra comiendo habichuelas, fruta, verduras, pan integral y cereales de grano
entero.
Agua: la
deshidratación y la fatiga están relacionadas. Algunos estudios sugieren que
incluso una deshidratación suave puede ralentizar el metabolismo y acabar con
nuestra energía. La solución es simple: beber mucha agua u otras bebidas sin
azúcar, a intervalos regulares.
Productos
frescos: otra manera de mantenerse hidratado y con energía es
tomar alimentos llenos de líquido, como la fruta y las hortalizas frescas.
El
chocolate puro: una ración diaria de chocolate puro pueden
aumentar nuestra energía y nuestro estado de ánimo gracias a la cafeína y otro
estimulante denominado teobromina.